Paisajes Domésticos

Este es el título de la Tercera exposición visitada de Fotoencuentros 2010. Pertenece a Bert Teunissen, y se muestra en Molinos del Río (Sala Caballerizas).

¿De qué va?

En este proyecto Teunissen dirige su mirada hacia lo rural, estableciendo una fuerte relación de complicidad con las personas, lo que le permite entrar en su privacidad y fotografiarlos con gran naturalidad. Paisajes domésticos es una invitación al espectador para saborear y valorar la riqueza y autenticidad de los personajes, de su entorno doméstico y de su iconografía social, en un mundo, de enorme interés antropológico cada vez más al borde de la extinción. Teunissen construye sus escenas con composiciones muy sencillas, pero estudiadas cuidadosamente, toma las imágenes con la luz natural disponible esperando al momento adecuado para conseguir unas obras de gran belleza, plenas de drama y nobleza. La obra Paisajes domésticos de Teunissen es un recorrido por distintos países. La exposición que presentamos aquí está integrada por la imágenes que hizo en Portugal y que se presentó por primera vez en el Museo de la Imagen de Braga.

Opinión Personal

- La exposición:

No podía ser mejor el entorno para realizar esta exposición, que la sala en la que se encuentra. Hay una gran armonía entre las fotografías, y la decoración del entorno. Debido a que en la sala, podemos observar maquinaria antigua, tales como molinos de agua, etc. Que crean un perfecto ambiente con las fotografías de pueblos antiguos y gente mayor.

- Las fotografías:

Perfectas. La luz que emplea, totalmente correcta y acorde con la imagen, muy cálida y acogedora, según el tipo de casa.

- Algo curioso:

Podemos apreciar en casi todas las fotografías, la aparición de calendarios. Estos calendarios, no tienen relación con la fecha en la que se hicieron las fotografías, por tanto, es algo muy curioso que merece ser destacado.

Por otro lado, destacar la naturalidad de las imágenes, ya que ninguna ha sido manipulada para conseguir dichas luces, contrastes, etc.

También es de destacar, la luz que entra por las ventanas de las casas.

Lo que más llama la atención de las fotografías, es su gran formato, ya que al ser tan grandes, parece que estemos dentro de la propia escena, y seamos nosotros los que tomamos la fotografía. Efecto muy bien conseguido gracias a las fotografías montadas a sangre.

Algo que también es bastante curioso es que ha alternado espacios públicos, como barberías, con hogares privados.

- Algo negativo:

Su distribución. Me gustaba todo, hasta que tuvimos que cambiar de sala para continuar viendo la exposición. Un gran error en mi opinión.

- Fotografías a destacar:

"Minas de Sao Domingos #2".

Me ha encantado esta fotografía. La escena es impresionante con las fotografías antiguas en blanco y negro colgadas en la pared. La iluminación es totalmente acertada, cálida, muy propia de las casas de pueblo en las que la luz del sol entra por los grandes ventanales.

Composición perfectamente equilibrada, arriba la pared con varias fotografías, y abajo en el suelo, y en el centro, un anciano (supongo que será el propietario de la casa).

Fotografía recomendada.

- A destacar:

El gran formato.

Lo que el autor quiere transmitir lo consigue totalmente: el tiempo parece detenerse en los pueblos, la calidez de las casas antiguas iluminadas con bombillas amarillentas, la luz solar que entra por las ventanas, las vestimentas de los personajes, etc.

En la primera sala, que es donde se encuentra la maquinaria antigua de madera, el olor te transporta a dichas casas, en las que, debido a la antigüedad de los materiales con las que fueron construidas, tienen un olor similar.

Exposición recomendada!.

- Valoración media: 8